En una olla grande llena de agua, cocer las papas hasta que estén blandas, drenar el agua (guardar una taza de esta agua) y luego majar las papas, para esta receta se necesita una taza de puré de papas (unos 2 papas).
A fuego medio bajo, agregue la leche y la mantequilla, cocinar hasta que la mantequilla se derrita, añadir el agua de papas, deje que se enfríe, cuando esta mezcla este tibia, espolvorear la levadura sobre esta mezcla, dejar reposar durante unos minutos hasta que se vuelve espumosa o burbujeante.
En un tazón, mezcle la levadura con el puré de papas; añadir el azúcar, la sal y los huevos y mezclar hasta que estén bien combinados, luego, agregar la harina, esto va a formar una masa suave. Coloque la masa en un recipiente engrasado. Cubra con papel plástico y deje crecer en un ambiente cálido en su lugar hasta que doble de tamaño, aproximadamente 1 hora.
Golpee la masa, dividida en porciones pequeñas (alrededor de 50 g cada uno) y luego dar forma a cada pieza en una bola. Colocar las bolitas en una bandeja de hornear engrasada. Cubra con papel plástico y dejar levar hasta que doble de tamaño nuevamente, unos 30 minutos.
Pinte los panecillos con mantequilla derretida. Hornee a 375 F por 15-20 minutos hasta que estén dorados. Retire del horno y sirva caliente.